Las fábricas de metal son en su mayoría empresas de tamaño medio o pequeño. A veces fabrican marcos metálicos, pero también barandillas, diversos tipos de carpintería metálica, escaleras, puertas, etc. A menudo gestionan la programación manualmente, pero la programación automática de la producción puede suponer un ahorro importante. Los puestos de soldadura también son muy importantes y las piezas a soldar a veces pueden ser complejas. Además, hay muy poca estandarización en los casos producidos. Los tratamientos son principalmente de pintura y a veces de galvanizado.